Enfermero Especialista en Enfermería Pediátrica, Máster Oficial en Gestión Sanitaria, Experto Universitario en Emergencias Extrahospitalarias.
16 años de experiencia en 6 hospitales (Hospital Virgen del Mar, H.U Príncipe de Asturias, H.U 12 de Octubre, H Carlos III, H.U Gregorio Marañón, H.U. Ramón y Cajal)
Miembro de la comisión clínica de Enfermedades Infecciosas y Política Antibiótica del H.U. Ramón y Cajal
En la actualidad enfermero de la unidad de Enfermedades Infecciosas del H.U. Ramón y Cajal
Apasionado del Rayo Vallecano, me gusta el baloncesto y el ajedrez, practiqué boxeo cuando era más joven pero sobre todo y por lo que estoy más agradecido es por la familia que tengo y el trabajar en lo que más me gusta, no creo que pudiera ser otra cosa que no fuera enfermero.
1 ¿Qué es para Ud la humanización?
Pues tengo que ser franco y fiel a mi pensamiento, que sé que no es lo políticamente correcto en la actualidad, pero intentaré explicar mi humilde opinión de la mejor manera posible.
Los que me conocen o me han leído alguna vez por las redes sociales saben que no creo que esta palabra tenga cabida en el ámbito sanitario, lo que sí creo que tiene cabida es la búsqueda de la mejora continua en el sistema sanitario y eso implica buscar la mejora en todos sus niveles y en todos sus procesos
Es realmente sorprendente como un buen marketing y un apoyo político e institucional mantenido en el tiempo, no hay político ni directivo que se precie que no tenga su foto con la mano en forma de “H”, han conseguido introducir un término en nuestro ámbito cuyo significado sinceramente creo que no nos hemos detenido seriamente a pensar y es que su uso indiscriminado y las connotaciones que transmite al ser usado normalmente en contextos negativos, suele terminar frecuentemente señalando al profesional .
La realidad es que es una palabra que no concreta y que parece se quiere explicar como un problema multifactorial en el que deficiencias materiales y/o déficits en habilidades y conocimientos de diferente índole crean un perjuicio en la asistencia al usuario, este “totum revolutum” con el que se cambia el significado tradicional de la palabra creando un nuevo neologismo, han propiciado en un breve periodo de tiempo la mercantilización de las soluciones a estos déficits, ofertando multitud de cursos ,jornadas, máster .
El uso de esta palabra se realiza en el ámbito profesional, regido por normativa jurídica que es la que regula nuestra buena praxis, parece claro entonces que lo que se nos pide es profesionalidad y profesionalismo cuyos claros significados no se reducen solo a la realización de una técnica correctamente ya que pretende la mejora continua del profesional preocupado en dar un producto de calidad que busca la excelencia, mostrando así el camino de la mejor atención posible al usuario.
José María Antequera en su artículo “Humanizar la atención sanitaria es cumplir la ley, hagámoslo” publicado en Nuestra Enfermería Fanzine, lo definió muy bien, la humanización la conseguimos cumpliendo nuestra normativa legal.
Si hablamos específicamente de la enfermería, este término todavía tiene menos razón de ser ya que dentro de nuestro constructo teórico, nuestro código ético y de nuestro P.A.E tenemos el camino para saber que es lo que nos pide el usuario, como relacionarnos con él y así prestar la atención y el cuidado excelente que precise. Los déficits que encontremos, que no niego que existan, deben de ser buscados, focalizados y solucionados desde nuestra identidad como profesión, no aceptando palabras externas pegadizas, que repito no definen el problema.
En resumen que rechace el uso de esta palabra baúl en sanidad no impide que reconozca la existencia de déficits que deben de ser concretados y a los que se deben de implementar medidas especificas para su solución.
2 ¿Tiene alguna experiencia personal en el mundo de la humanización de la sanidad?
No, de humanización no tengo ejemplo, pero si la tengo de profesionalidad, soy testigo a diario de multitud de compañeros y compañeras que derrochan todos los días profesionalidad, profesionalismo y que demuestran altos valores bioéticos en sus decisiones de cuidados.
Desde un punto de vista más personal os puedo explicar mi experiencia como familiar cuando hace una año operaron a mi madre de hernia de disco cervical y recuerdo a la enfermera informando de una manera excelente de los cuidados que le realizaba y de los cuidados que precisaría a su alta, pero lo que me termino de convencer para escribir la nota de agradecimiento que realicé en atención al paciente, fue saber que se recorrió medio hospital para conseguir el collarín que el médico recomendó y que en ese momento no tenían en la unidad.
3 ¿Cómo humanizaría el mundo de la gestión?
Como escribí antes, que no crea en la palabra humanización en el ámbito sanitario no significa que no crea en la mejora continua y en la búsqueda de la excelencia que es lo que toda organización debe buscar, por decirlo de una manera más clara y simbólica, no creo en el político o directivo que se hace su foto con la mano en forma de H pero sí creo en la rueda de Deming o en el uso de herramientas de gestión que nos den evidencia en la toma de decisiones.
Por tanto lo que se debe de hacer con la gestión es profesionalizarla, dándola autonomía suficiente e independizándola de la variabilidad y volatilidad política y sobre todo como bien decía mi profesor de máster Miguel Noblejas gestionar desde una clara perspectiva basada en la calidad, esto nos dará una serie de herramientas que nos facilitaran la toma de decisiones.
Punto nuclear es también la elección de la persona correcta, el candidato, debe ser el mejor para el perfil del puesto, debemos desterrar los amiguismos, y debe de contar con unas competencias que podrían variar algo según nos estemos refiriendo a gestión macro, meso o micro pero que como mínimo y condición “sine qua non” deberán contar con, formación, capacidad de motivación, valentía para la toma de decisiones, empatía y escucha activa.
Si me permiten, en mi experiencia y llevo seis hospitales, es característico de los buenos gestores el tener siempre la puerta abierta.
4 ¿Opina que los valores y la ética van de la mano a la hora de re-humanizar la organización?
Los valores y la ética deben de estar presentes en la toma de todas nuestras decisiones como profesionales, son garantes de nuestra profesionalidad y buena praxis.
Tienen suficiente contenido y valor por ellos mismos para no necesitar ser englobados en neologismos que podrían difuminar sus significados.
5 ¿Dónde debe iniciarse la humanización?
Como supondrán por todo lo anteriormente escrito, la humanización deberá de iniciarse en otro ámbito diferente al sanitario, supongo que la cooperación internacional es más proclive al uso de esta palabra. Pero si me pregunta por la profesionalidad que humildemente creo es el termino más correcto, esta debe de plantarse como una semilla en la Universidad. Hablando específicamente otra vez de nuestra profesión el estudio y conocimiento de nuestras teóricas, técnicas, método científico, nuestro modelo de atención, habilidades sociales, valores bioéticos , el ámbito en el que nos movemos. Junto con las experiencias y valores intrínsecos de la persona crearan al profesional que tendrá que actuar de una manera profesional empleando las herramientas que empezaron a inculcarle en su periodo formativo
6 ¿Conoce a algún personaje histórico que fuera humanizador?
No me voy muy atrás en el tiempo. El padre Ángel, realizando su gran labor humanitaria desde 1962.
Si me permite un par ejemplos históricos de enfermera que visibilizaron y dieron contenido a la profesión enfermera:
Elisabeth Kenny
Dorothea Orem
7 Por su experiencia como enfermero asistencial como cree que debería enfocar el Proyecto HUGES sus actividades?
Si bien es cierto que cada profesional debe asumir su responsabilidad en la gestión, independientemente del nivel en el que se encuentre “TODOS GESTIONAMOS” enfocaría el proyecto hacia el gestor meso y macro fundamentalmente, desde la perspectiva de la investigación, punto fundamental a incentivar desde toda dirección, creando evidencia para un cambio de enfoque hacia la profesionalización y hacia sistemas de dirección basados en la calidad y seguridad del usuario que faciliten la praxis de la enfermera asistencial.
No quisiera terminar esta entrevista sin expresaros mi agradecimiento por vuestra atenta invitación en la que me habéis permitido dar mi visión sobre este tema.
Muchas gracias.